Alguna vez leí del poeta español Antonio Machado: “El ojo que ves no es ojo porque tú lo veas, es ojo porque te ve”. “El ojo que él ve no es ojo porque él lo vea, es ojo porque le ve”.
En estas dos frases queda englobada cierta sabiduría sobre el ejercicio de ver, observar el mundo, comprender el significado de la información que llega a nuestros ojos.
El arte es uno de esos ejercicios que motiva al ser humanos a ver, observar, reflexionar; aunque existen diferentes artes, escénicas, visuales, etc. De allí que tengamos diferentes gustos en lo que cada uno de nosotros cree o considera que es arte. Algunos llamaremos arte a una pintura de un reconocido artista, otros llamaran arte a una escultura hecha con chatarra y plástico derretido, y es que los gustos visuales rompen los esquemas conceptuales del arte.
Cómo se ve el arte
Ver el arte de una manera propositiva, sin elitismo, con el sentido del libre acceso, derogando cuestiones histórico-culturales. Y es que ver se convierte en no solo en capacidad sino también en poder y esto lo saben los pintores, músicos, y artistas en general.
Lo que se debería ver como arte sería en un aspecto práctico el llevar el espectáculo a esos sitios considerados excluidos de la posibilidad de ver. Ver el teatro por ejemplo identifica las cotidianidades de nuestro mundo, es el contacto diario con lo que somos a través de los ojos y vivencias de otras personas.
La influencia del arte
El arte influencia a las personas a medida que esta se identifica con el arte que le gusta a cada cual, comúnmente, cualquier arte muestra un pedacito de la vida en sociedad, por eso nos vemos reflejados en la obra de teatro, en la pintura incluso la del grafiti callejero, no el arte de lo absurdo en lo abstracto, esto hace sentir extraña la mirada en muchos casos.
El arte para ver es influyente en la medida en que el artista o el autor quieran hacerse entender y desear por el ojo ávido del observador desprevenido. Las personas están hechas en el arte, en el contexto y en el concepto, en lo que se vive en lo que se ve con los ojos, arte que puede hacer pensar o simplemente puede hacer gustar por lo que genera en la mirada.