Un día puedes ver normal a través de tu ventana, al otro día amanece lloviendo, tu ventana se empaña e impide tu visión. Imagina esto mismo, pero en tus ojos. Así es la opacidad corneal.
La córnea protege la visión de diversos factores ambientales y es su transparencia la que permite el paso de la luz al interior del ojo. Al sufrir de opacidad corneal, la transparencia se pierde en diferentes grados.
Son múltiples las causas de la opacidad corneal, entre las principales se encuentran:
Deficiencia de vitamina A.
Lesiones ocasionadas por golpes, cuerpos extraños dentro del ojo o sustancias químicas.
Infecciones como la conjuntivitis.
Inflamación del ojo.
La opacidad corneal puede tratarse de diferentes formas dependiendo de su causa y de su gravedad. En casos menos graves su tratamiento consiste en medicamentos vía oral y gotas para los ojos. Casos más severos requieren cirugía láser e incluso un trasplante de córnea.
Consejos para prevenir la opacidad corneal
Protege tus ojos cuando realices actividades que los puedan poner en riesgo.
Si sientes algún cuerpo extraño en el ojo, evita rascarte. De esta manera evitas lesiones en la córnea que pueden desencadenar en problemas más graves como la opacidad corneal.
Si usas lentes de contacto cuida su higiene y evita permanecer largos periodos con ellos.
Visita al oftalmólogo si ves algo inusual en tu ojo. Recuerda que un problema visual detectado a tiempo es más fácil de solucionar.
Si tu visión se ha vuelto borrosa, así sea mínimamente, debes consultar con el oftalmólogo.